Teoría del triángulo del delito

Teoría del Triángulo del Delito

Para una mayor compresión del fenómeno delictivo, se tiene que considerar dimensiones las cuales podremos evidenciar a través de la teoría del triángulo del delito o también conocida “el triángulo de la criminalidad” que su postulado se da por Cohen y Felson, donde su conformación presenta dos componentes los cuales una es interna y la otra externa, es decir, son componentes que van a dar explicaciones de la concurrencia del delito. 

Veamos a continuación la imagen para tener claridad de lo mencionado:

Imagen 1: triángulo criminal (Yamanaka, s.f.)

Esta teoría es muy importante para el análisis delictual, porque permite focalizar acciones para prevenir la ocurrencia de delitos futuros mediante el análisis y cambio en alguno de estos 6 aspectos (Fundación Paz ciudadana, p. 63, 2010). 

Como se denota en los componentes internos: delincuente, víctima y lugar. Sobre los externos: manipulador, guardia y responsable. A partir de aquí se puede dar una compresión en cómo funciona el triángulo.

Ahora bien, se habla de delincuente en el triángulo y para no entrar a profundidad en el tema, dado que existen tipos de delincuentes descritos por Cesare Lombroso, por lo cual se puede hacer  mención que el delincuente es la figura de un individuo cuyos actos intervienen en un delito, donde al mismo tiempo puede tener características de calidad de autor, cómplice, estén relacionados a un acto punible.

En relación con la víctima, son todas aquellas que han sufrido algún daño físico de manera directa, lo cual sus derechos humanos producto de una comisión de delito son violados.

Y, victimario se refiere quien realiza un daño a la víctima, sin embargo, algunos de los victimarios han sido víctimas de situaciones de violencia en su entorno familiar, lo cual hay un cambio de roles.

Sobre el lugar, está vinculado al contexto de espacio, en los cuales existen características de definición, como urbano o rural, también se pueden agregar centros de recreación como parques. Aunado a esto, son áreas donde pueden cometerse el delito o acción delictiva.

Estos elementos vistos en el triángulo permiten realizar un análisis de problema, donde la teoría expone que delito, emerge cuando hay unión de autor (delincuente), una víctima u objetivo y un lugar donde se involucra circunstancia para llevar a cabo la comisión del delito. 

Por su parte, la teoría del triángulo criminal, tiene relación con la denomina teoría de las actividades rutinarias, dado que motiva a la realización de la comisión de un acto delictivo por la convergencia de elementos como tiempo y espacio, esto a su vez posibilitando a un ofensor, un objetivo que en este caso la víctima, y por la carencia de guardianes.  Por lo tanto, se establece que la teoría formula la ocurrencia de un delito cuando a este se le suma un blanco (víctima) donde en ocasiones hay carencia de un guardián presente.

Entonces, ¿qué aportes da esta Teoría?, es una herramienta de utilidad para poder analizar problemas en una comisión de delito, así como también brindar soluciones posibles a la eventualidad. Por ejemplo, algunas situaciones que es aplicada la teoría se derivan de las principales problemáticas que enfrentan los policías, que el autor esté involucrado y atacando a diferentes víctimas pero en distintos lugares (tiempo y espacio).

Como se pudo notar en el triángulo del delito se presentó las aristas internas, para que un delito ocurra necesita un delincuente potencial y un objetivo, este caso la víctima propicia coincidan en tiempo y lugar, la cual el acto se da sin la presencia de un guardián.

En algún momento escuchaste la frase: “la oportunidad, hace al ladrón”, es decir cuando hay un aumento de la oportunidad también existirá un índice del delito.

Un dato interesante e importante que se puede agregar a esta teoría, está relacionada con la teoría de las actividades rutinarias, así como también a la teoría de la elección racional, dado que la primera se compone de alteraciones sociales de manera estructural, provocando así cambios rutinarios en las actividades de un grupo de personas o comunidad.

Por su parte, el vínculo con la teoría de elección racional, motiva a que el delincuente plantea o decide cambiar sus objetivos criminales, esto permitiendo que haya un traslado motivacional y más ligero ante la ausencia de guardianes. Lo preocupante acá es la carencia de un control formal e informal, donde el Estado debe delegar funciones a otras instituciones para estas ejecuten la aplicación de sanción y velen por el cumplimiento de las normas. Dentro de las autoridades que el Estado delega las cuales están: administración de Justicia, Fiscalías, cuerpos de seguridad, entre otras; la cual su principal función es poder brindar una tarea de vigilancia y seguridad a la sociedad.

Sin embargo, el papel que puede aportar el control social informal conllevaría la función de la misma del formal pero la excepción de realizarlo a través de los medios no institucionalizados, es decir, por cuerpos policiales o Fiscalía; ya que, este tipo de Control se produce en la socialización de las personas, en donde intervienen distintas instancias como la familia, la escuela o los medios de comunicación, porque serán las encargadas de enseñar al individuo las normas por seguir, así como también valores y métodos de conducta para poder ser integrado en la sociedad.

Por lo tanto, hasta este punto se debe tener claro sobre la influencia de los agentes sociales, en relación con gran medida a cualquier organización, institución, grupos organizacionales, asociaciones, entre otras, que tienen como fin contribuir o ayudar en el proceso de socialización y protección.

De esta manera se evidencia que habrá mayor vigilancia y seguridad si existiera mayor control formal por parte del Estado, dado que este debe ser garante de nuestra protección. Así como también esta Teoría del triángulo criminal ante ausencia de agentes de vigilancia propician que el delincuente saque mayor ventaja de esto cambiando su motivación y objetivo (víctimas).

Ahora bien, las aristas del triángulo del delito están los externos, como pudimos ver al inicio e imagen son tres: manipulador, guardia y responsable.

Lo anterior, se puede mencionar que el manipulador o controlador también conocido, es un sujeto que guarda cierta cercanía con el delincuente, ya que puede tener una posición de un familiar, sea un hermano, tíos, madre, entre otros.

En la arista de guardián, se pueden ubicar aquellos individuos que tiene como rol la protección y el resguardo de su patrimonio, como el caso de la familia, amigos. Además, agregar el control formal donde existen instituciones que brindan protección y vigilancia, como los agentes de seguridad, cuerpos policiales.

Para culminar, rel esponsable alude al acto que debe tener un administrador de un lugar como el caso de los bares reforzando la seguridad y vigilancia de su local.

Un ejemplo de este tipo de teoría se puede apreciar en el reciente caso del joven que por robarle sus pertenencias fue apuñalado al salir de un Bar cerca de "La California" : Cámaras implican a cuatro sujetos en asesinato de Marco Calzada en San José. 

Referencias bibliográficas 

Felson, M y Clarke. R. (1998) Opportunity Makes the Thief, London: Home Office Policing and Reducing Crimi Unit, Research, Development and Statistics Directorate.

Fundación Paz Ciudadana (2010). Análisis delictual: enfoque y metodología para la reducción del delito. Obtenido de: https://pazciudadana.cl/biblioteca/documentos/analisis-delictual-enfoque-y-metodologia-para-la-reduccion-del-delito/

Pordoménico, L (2014). Delitos contra la propiedad en Godiy Cruz Mendoza. Programa de prevención situacional de delitos contra la propiedad. Obtenido de:             http://bibliotecadigital.uda.edu.ar/objetos_digitales/504/tesis-3645-programa.pdf

Yamanaka, R (s,f). El triángulo del delito, una explicación sencilla. [Archivo de imagen]. Obtenido de: https://www.guardsapp.com/post/triangulo-del-delito-sencillo